El tren saliendo hacia el campo con sus emocionados pasajeros.
Salía por Sobrevilla giraba a la izquierda a la altura del camino de Carboneros y llegaba hasta el camino Villar por el que regresaba al pueblo entrando por el barrio de bodegas del Cierzo
Creo Toño que tu gente podía llegar hasta casa sin cansarse en la cuesta... El maquinista no paró ni un segundo, había cola para montarse en el tren que hizo las delicias de niños, jóvenes y mayores.
Un derroche de generosidad por parte de los organizadores del evento el traerlo.