El trenecito no paraba de transportar gente a las puertas de todas las bodegas participantes. Antes les daba un pequeño paseo por nuestros viñedos.

(2 de Agosto de 2014)

Estoy de acuerdo contigo Toño... la gente lo pasó de vicio y los bodegueros merecen un DIEZ por su buen hacer, sus bodegas estupendamente engalanadas, sus pinchitos para degustar, sus magistrales explicaciones y qué decir de esos caldos que nos ofrecieron.
HURRA HURRA HURRA por ellos.
Los forasteros disfrutaron de lo lindo del ambiente del pueblo y de las distintas degustaciones y catas ofrecidas en las bodegas que abrieron, de manera totalmente desinteresada, sus puertas a todo aquel que quiso conocerlas in situ. Todo el mundo salía encantado del trato recibido y de los distintos eventos preparados para la ocasión.
El esfuerzo de todos nuestros bodegueros para que toda la jornada fuese un éxito
merece todo mi respeto y admiración.