Nacho, no puedo dejar de decir lo mismo, eres un artista y como tal nos conmueves. Nos haces volver a vivir bonitos recuerdos y como se suele decir, recordar es volver a vivir.
Recuerdo el sindicato sin el edificio de la terraza. Creo que éste se construyó para garaje cuando se compró la cosechadora.
El herradero antes fue un lavadero, también muy similar al que luego se construyó cuando hicieron la fuente nueva. Éste se abastecía por el río que bajaba de Valdecañas, mientras que el abrevadero, que por cierto se conocía con el nombre de PILÓN, y este otro lavadero lo hacía de la fuente vieja. Ésto dejó de funcionar cuando se hizo la fuente nueva en 1951 pero permaneció algunos años más excepto el lavadero cubierto que pasó a ser herradero.
Por aquellos años era muy frecuente, nuestras madres y abuelas coger el burro e ir a lavar al rio de Badarán.
Por cierto en ese lavadero, recuerdo que algunos días de verano, mientras la gente estaba en la siesta, los chiquillos íbamos a bañarnos. ¡Y para que quieres más! Alguna señora mayor nos veía y nos gritaba y teníamos que salir por piernas despavoridos uno por cada lado con el miedo en el cuerpo diciendo "sálvese quien pueda". Qué tiempos aquellos.....
Lo dicho te felicito.
Saludos PEPE.
Recuerdo el sindicato sin el edificio de la terraza. Creo que éste se construyó para garaje cuando se compró la cosechadora.
El herradero antes fue un lavadero, también muy similar al que luego se construyó cuando hicieron la fuente nueva. Éste se abastecía por el río que bajaba de Valdecañas, mientras que el abrevadero, que por cierto se conocía con el nombre de PILÓN, y este otro lavadero lo hacía de la fuente vieja. Ésto dejó de funcionar cuando se hizo la fuente nueva en 1951 pero permaneció algunos años más excepto el lavadero cubierto que pasó a ser herradero.
Por aquellos años era muy frecuente, nuestras madres y abuelas coger el burro e ir a lavar al rio de Badarán.
Por cierto en ese lavadero, recuerdo que algunos días de verano, mientras la gente estaba en la siesta, los chiquillos íbamos a bañarnos. ¡Y para que quieres más! Alguna señora mayor nos veía y nos gritaba y teníamos que salir por piernas despavoridos uno por cada lado con el miedo en el cuerpo diciendo "sálvese quien pueda". Qué tiempos aquellos.....
Lo dicho te felicito.
Saludos PEPE.
Pepe, te felicito tambien a ti por tu memoria y tus relatos tan interesantes que nos hacen recordar los tiempos del "pilón". Un saludo.