CORDOVIN: Una cosa que me chocó de Don Luis cuando llegó a Cordovín,...

Buenas noches a todos,
Este hachero lo teníamos en el "alto", hemos tenido que darle un frotadito para que salga en la foto. Este es de dos velones y tres velas. En este caso, no dispongo de las velas adecuadas, pero, para la foto he puesto unos retales y encendidos. Eso que tu llamas porta velas, que no recuerdo el nombre correcto, se ponen en la posición de la foto.
Saludos
Cipri
Del River, se nota que no terminaste la carrera completa de managuillo de don Luis.

tienes toda la razon ciprianus; no solo no termine mi carrera de monaguillo con don luis, si no que ni siquiera la empece. entre este buen hombre y yo existia como una especie de, como lo diria yo, "mala relacion", quiero decir que nunca hubo "feeling" entre los dos. decirte que este buen hombre, a mi me repartio un monton de hostias, mas de unas que de las otras. recuerdo que muchas veces cunado iba a comulgar en vez de decirme... el cuerpo de cristo, para yo contestar amen, me decia... entra para la sacristia. en ese mismo momento, sabias que iba haber un reparto de las otras hostias dentro. me acuerdo que otro de los que disfrutaba del mismo privilegio que yo era martin, tambien solia comulgar "doblemente". puede que fuera por que éramos un poco traviesos, o puede que aquel cura tuviese un poco de mala hostia y lo pagaba con nosotros, no se, no se. yo he visto a don luis pegar..., buenooo, HASTA CON LA LLAVE DE LA IGLESIA, y fijate si serian duras las cabezas, que ni sangraban ni nada, bueno algun que otro chichon si, para que lo vamos a negar. pero ya estabamos acostumbrados y nos parecian cosas totalmente normales y naturales, que formaban parte de nuestra vida cotidiana. ¡que tiempos!.
ya iremos contando anecdotas de los curas y maestros que pasaron por nuestra infancia.
saludos.

Una cosa que me chocó de Don Luis cuando llegó a Cordovín, es que tenía un cáliz (cada párroco traía uno de su propiedad) que parecía un copón (cáliz más grande y ancho donde se guardaban las hostias en el sagrario y se sacaba para dar la comunión). Pues bien, al poco tiempo de llegar, estaba Don Luis limpiando en la sacristía el susodicho cáliz-copón cuando mi quinto forero (y monaguillo) Fernando hizo una trastada por la que recibió un buen "calizazo" en el cogote. No recuerdo lo que le duró a Fernando el dolor, pero, al cáliz, el bollo le duró muchos años de misas... Nos reímos muchas veces a costa de aquel bollo.