Qué tiempos aquellos para la chiquillería... pasar el día al aire libre y bañándonos en el Najerilla, y aquellas comidas campestres exquisitas fuera del tedioso y oblgatorio cocido de caparrones...
Se ha perdido la costumbre por lo que todos sabemos, llegó el progreso, el agua corriente en las casas y las benditas lavadoras que permitieron que nuestras madres descansaran un poco, pues no hay que olvidar que el día de fiesta no era ni mucho menos para ellas, que además de preparar la comida en casa, luego llevaban a lavar a mano de rodillas en aquellos cajones, las mantas del invierno... qué palizas, y sin protestar, lo único bueno era que no existía el "estrés" e incluso disfrutaban del día a la sombra de los chopos..-
Y los gitanos que cogían los juncos para hacer las cestas que luego nuestras madres compraban para llevar la comida a la viña en vendimias sobre todo...
Buenos recuerdos si señor.
Se ha perdido la costumbre por lo que todos sabemos, llegó el progreso, el agua corriente en las casas y las benditas lavadoras que permitieron que nuestras madres descansaran un poco, pues no hay que olvidar que el día de fiesta no era ni mucho menos para ellas, que además de preparar la comida en casa, luego llevaban a lavar a mano de rodillas en aquellos cajones, las mantas del invierno... qué palizas, y sin protestar, lo único bueno era que no existía el "estrés" e incluso disfrutaban del día a la sombra de los chopos..-
Y los gitanos que cogían los juncos para hacer las cestas que luego nuestras madres compraban para llevar la comida a la viña en vendimias sobre todo...
Buenos recuerdos si señor.