Aunque Pepe ha contestado muy bien, voy a escribir un poco sobre cómo se segaba y se trillaba hace unos pocos años, para que los más jóvenes que no lo han visto se enteren un poco. Voy a empezar por los años 40.
En esos años a finales de Junio por San Juan y San Pedro se empezaba a segar, se hacía a mano, se ponían en una mano una zoqueta, (que es de madera pero como un guante sin dedos, terminado en punta) y con la otra mano se cogía la hoz bien afilada para que cortara bien la paja. Se hacían gavillas, y después de unos días se iba con el carro y se llevaba a la era, una vez que ya se había traído bastantes gavillas se tendía por la mañana sobre la era.
Como bien decía Pepe había que mirar al cielo para ver qué tiempo iba hacer, porque si se veía que estaba de tormenta no se atrevían a trillar ese día.
La cebada se trillaba de la siguiente manera: una vez tendida toda la mies, enganchaban a las caballerías a un rodillo y empezaban a dar vueltas por encima de la mies para que el grano se separara de la paja, cada media hora o una hora se daba vuelta a la paja y se ponía lo que estaba por debajo a la parte de arriba, una vez que se veía que se habían separado los granos de la paja se quitaba la paja y se ponía a la orilla de la era, como el grano se había quedado por la era se ponía el trillo para que lo arrastraran las caballerías hasta que el grano quedara limpio por completo.
Mañana diré como se hacía con el trigo.
En esos años a finales de Junio por San Juan y San Pedro se empezaba a segar, se hacía a mano, se ponían en una mano una zoqueta, (que es de madera pero como un guante sin dedos, terminado en punta) y con la otra mano se cogía la hoz bien afilada para que cortara bien la paja. Se hacían gavillas, y después de unos días se iba con el carro y se llevaba a la era, una vez que ya se había traído bastantes gavillas se tendía por la mañana sobre la era.
Como bien decía Pepe había que mirar al cielo para ver qué tiempo iba hacer, porque si se veía que estaba de tormenta no se atrevían a trillar ese día.
La cebada se trillaba de la siguiente manera: una vez tendida toda la mies, enganchaban a las caballerías a un rodillo y empezaban a dar vueltas por encima de la mies para que el grano se separara de la paja, cada media hora o una hora se daba vuelta a la paja y se ponía lo que estaba por debajo a la parte de arriba, una vez que se veía que se habían separado los granos de la paja se quitaba la paja y se ponía a la orilla de la era, como el grano se había quedado por la era se ponía el trillo para que lo arrastraran las caballerías hasta que el grano quedara limpio por completo.
Mañana diré como se hacía con el trigo.