CORDOVIN: ! Qué se puede decir después de esta alocución... ¡una...

Zoquete es una cosa y ZOQUETA otra….. El que creo este artilugio no tenia nada de lo primero.
En un mensaje anterior nuestro jefe Vito, muy bien lo ha descrito. Era como un “guante”. A hora añado yo. Un guante mal trazado y ordinario, nada recomendable para vestir un dia de “gala”, ni tan siquiera un domingo cualquiera para el desfile de misa mayor.
Para todo aquel que no lo sepa, asi hacia su función. Se introducen los cuatro dedos y el gordo en el exterior y la cuerda se ataba a la altura del reloj. En principio parecía una cosa incomoda, y poco eficaz, pero enseguida apreciabas su gran utilidad. Hacia dos importantes funciones. Que la mano ahora era tremendamente grande, y el manojo a recoger también era mayor. La otra que te protegía de un peligroso enemigo, del “filo” de la hoz, pues con frecuencia notabas su mala intención.
Dicen que gato con guantes no caza ratones. Pero estos guantes hicieron estas dos funciones.
Asi lo vio y ahora lo cuenta este humilde segador.

! Qué se puede decir después de esta alocución... ¡una maravilla.