Pues si Lourdes, yo también pienso como tú, que eran tiempos de hambre “mucha hambre” posiblemente los recortes que saldrían para igualar las “pezuñas” y acoplar las herraduras se las comería el mismo animal, igual hasta diría “hoy asido un buen día”. Digo esto porque en el herradero de nuestro pueblo, era normal ver algún perro comer esta “cecina”.
En cuanto a los soldaditos, es de suponer que aun después de comer, también se quedaran con hambre, la idea de hacer “cecina” no estaría en su mente, demasiado tiempo de espera y para entonces seria tarde.
En cuanto a los soldaditos, es de suponer que aun después de comer, también se quedaran con hambre, la idea de hacer “cecina” no estaría en su mente, demasiado tiempo de espera y para entonces seria tarde.