Buenas noches, paisanos y foreros. Al ver esta foto Toño, me sorprendo el enorme parecido que le encuentro a tu bisabuelo Valerio, por cierto un hombre entrañable.
En cuanto a los nombres de las campanas, que yo recuerdo eran así. Esta que se halla en la cara del reloj, se conocía con el nombre de “campana”. Que por cierto cuando yo era pequeño, creo que fue esta, un año e San Cristobal y encontrándose la procesión debajo se desprendió el “badajo” y no pillo a nadie. Parece ser que en esta ocasión, San Cristobal ese día abandono el rio e hizo otra labor. Por cierto este “milagro” no asido incluido por nuestros historiadores foreros en su biografía.
En la parte, oeste, se encuentra la llamada “esquilón”. Creo que esta se volteaba en días muy señalados. Recuerdo que en una ocasión se agrieto y por seguridad no se podía voltear, sola mente funcionaba “el vaivén del badajo” y además tenía otro sonido “como a caldero”.
En la parte, este, se encuentra su hermana menor, de nombre “esquililla” y a ese lado en el tejado de abajo “la campanilla” esta la solían tocar los monaguillos, para actos menores de una cuerda que colgaba a la entrada de la sacristía, (creo que esta ahora se encuentra en la ermita) en fiestas señaladas se volteaban las tres a la vez.
Pienso que es una pena, con lo bien que LIBERIO interpretaba todas las funciones, con el se fueron también todas las partituras.
En cuanto a los nombres de las campanas, que yo recuerdo eran así. Esta que se halla en la cara del reloj, se conocía con el nombre de “campana”. Que por cierto cuando yo era pequeño, creo que fue esta, un año e San Cristobal y encontrándose la procesión debajo se desprendió el “badajo” y no pillo a nadie. Parece ser que en esta ocasión, San Cristobal ese día abandono el rio e hizo otra labor. Por cierto este “milagro” no asido incluido por nuestros historiadores foreros en su biografía.
En la parte, oeste, se encuentra la llamada “esquilón”. Creo que esta se volteaba en días muy señalados. Recuerdo que en una ocasión se agrieto y por seguridad no se podía voltear, sola mente funcionaba “el vaivén del badajo” y además tenía otro sonido “como a caldero”.
En la parte, este, se encuentra su hermana menor, de nombre “esquililla” y a ese lado en el tejado de abajo “la campanilla” esta la solían tocar los monaguillos, para actos menores de una cuerda que colgaba a la entrada de la sacristía, (creo que esta ahora se encuentra en la ermita) en fiestas señaladas se volteaban las tres a la vez.
Pienso que es una pena, con lo bien que LIBERIO interpretaba todas las funciones, con el se fueron también todas las partituras.
Pepe, tambien recordaras que la esquililla, era casi imposibble picarla y luego te picavan las manos de los manotazos que habia que darle
Picar la campana: Alcanzar unas revoluciones que la campana deje de sonar.