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Esta próxima semana Bodegas Florentino Martínez presenta este vino, Distercio;
es un crianza en roble autóctono, riojano.
La bodega tuvo la brillante idea, para revestir este vino, de hacer un concurso de microrrelatos cuya condición era que constara cuarenta y tres palabras-como la primera glosa en castellano- y apareciera el nombre Distercio-nombre con que se concían los montes del entorno de San Millán de la Cogolla-. El mocrorrelato ganador va impreso en la contraetiqueta y es el siguiente:
"Cada marzo, la luz se proyecta desde San lorenzo,
descomponiendo en añiles los arcanos códices de la
tierra. Nudosas manos de roble escriben con tinta de
sarmiento sobre el pergamino del valle versos a una
nueva primavera. Y en lo profundo, DISTERCIO despierta."
La autora es la navarra Laura Cabedo Caro.
Iniciativas como ésta, o la que tuvo Cesar del Río con su vino para el bicentenario de San gerónimo Hermosilla, enriquecen nuestro cordovinacho mundillo del vino dándole categoria.
Alabando y reconociendo estas ideas, que se multipliquen, esperando que la poesía se extienda a los precios de la uva
es un crianza en roble autóctono, riojano.
La bodega tuvo la brillante idea, para revestir este vino, de hacer un concurso de microrrelatos cuya condición era que constara cuarenta y tres palabras-como la primera glosa en castellano- y apareciera el nombre Distercio-nombre con que se concían los montes del entorno de San Millán de la Cogolla-. El mocrorrelato ganador va impreso en la contraetiqueta y es el siguiente:
"Cada marzo, la luz se proyecta desde San lorenzo,
descomponiendo en añiles los arcanos códices de la
tierra. Nudosas manos de roble escriben con tinta de
sarmiento sobre el pergamino del valle versos a una
nueva primavera. Y en lo profundo, DISTERCIO despierta."
La autora es la navarra Laura Cabedo Caro.
Iniciativas como ésta, o la que tuvo Cesar del Río con su vino para el bicentenario de San gerónimo Hermosilla, enriquecen nuestro cordovinacho mundillo del vino dándole categoria.
Alabando y reconociendo estas ideas, que se multipliquen, esperando que la poesía se extienda a los precios de la uva