CORDOVIN: En casa de mi madre en Hormilleja, estas matanzas han...

En casa de mi madre en Hormilleja, estas matanzas han sido un poco descafeinadas, porque nos han traído el picadillo hecho o sea adobado a falta de llenar en las tripas de intestino. Eso sí, con nuestra fórmula y los míos muy picantes.
Para llenarlos seguimos empleando esta maquinita con un adaptador tipo embudo que al final será una reliquia de museo.
Mi hermana pequeña, es la encargada del secado de toda la matanza. Los limpia si se quedan blancos por la humedad. Tienen la ventilación natural de los pueblos y el humo de la cocina-hogar, pero son matanzas descafeinadas, porque la matanza era una fiesta vecinal, que duraba tres días de comidas-cenas y otros tres de preparar las carnes para diferentes menesteres, como pancetas, costillares, cintas, solomillos, papadas, patas, orejas, jamones, morcillas, la cabeza asada (sino hacían "fuagrás") y los pellejos chumarrados, que nos pegaban si despellejabas algún jamón. Otro día escribiré de las morcillas, los "PRESENTES" y mas cosas con mas tiempo. Un abrazo.