Que envidia me dais los que viajáis tanto, que mal repartido está el mundo.
Ayer, por motivos laborales, me quedé con las ganas de saborear esa bonita procesión de San Cristóbal y La Virgen de Valvanera y no poder escuchar esos cánticos acompañados de jotas (que tanto me gustan) como tampoco pude subir el cohe a que me lo bendijeran. Menos mal que la víspera, saboreé el precioso liquido fruto del trabajo y de las uvas, de mi amigo "Abel Estebas", acompañado de unos costillares y un careta asada, para dar buen juego al ácido úrico y al colesterol, que tanto nos acompaña. Un tanato-chinche, que espera poder subir a medio-día, si mi trabajo me lo permite y quitarme la espinita de San Cristóbal.
Ayer, por motivos laborales, me quedé con las ganas de saborear esa bonita procesión de San Cristóbal y La Virgen de Valvanera y no poder escuchar esos cánticos acompañados de jotas (que tanto me gustan) como tampoco pude subir el cohe a que me lo bendijeran. Menos mal que la víspera, saboreé el precioso liquido fruto del trabajo y de las uvas, de mi amigo "Abel Estebas", acompañado de unos costillares y un careta asada, para dar buen juego al ácido úrico y al colesterol, que tanto nos acompaña. Un tanato-chinche, que espera poder subir a medio-día, si mi trabajo me lo permite y quitarme la espinita de San Cristóbal.