Ernesto, un personaje peculiar, creo que apreciado en Cordovín, nos ha dejado.
Por su parentesco, por sus limitaciones, por su forma de pasar por este mundo
merecía todo mi respeto y cariño.
Cordovín fue siempre un importantísimo punto de amarre en su incierto deambular.
Por mi aprecio a él recibo emocionado su último arribar.
Besos para su familia.
Por su parentesco, por sus limitaciones, por su forma de pasar por este mundo
merecía todo mi respeto y cariño.
Cordovín fue siempre un importantísimo punto de amarre en su incierto deambular.
Por mi aprecio a él recibo emocionado su último arribar.
Besos para su familia.