CORDOVIN: Gracias Toño, pensaba que vosotros no habríais conocido...

Gracias Toño, pensaba que vosotros no habríais conocido estos chopos, efectivamente lindaban con lo del Sr. Perico.
Mi tío Laureano, marido de Socorro, ahí tenía un cobertizo que era donde guardaba el carro, de tras estaban estos dos chopos gemelos, que presumían de una gran altura a seguido tenía una chopera que llegaba hasta el rio cirinzuelo. Siempre pensé que estos dos gemelos estaban en la finca de mi tío.
Por cierto estos dos chopos no eran como los demás del pueblo, no eran uniformes, pero en cambio si eran muy mal trazados, cubiertos de grandes troncos salientes que no guardaban ninguna uniformidad.
En un rincón de mi memoria, tengo de cuando yo era pequeño que un año hubo dos cigüeñas rondándolos con el fin de anidar ahí, pero no lo hicieron. Posible mente serian las primeras cigüeñas que yo habría visto entonces en mi corta vida.
Por cierto los chopos no se cada cuanto tiempo también se podaban, venían gente por el pueblo especializada en esa labor.