No es ni el mejor, ni el peor
pueblo del mundo. Es simplemente
San Asensio, pueblo en el conviven personas de diferentes procedencias, y que buscan diferentes objetivos, pero que tienen en común ése espíritu que transmite el pueblo. Gracias por transmitirnos esa paz de tus
paisajes, y esa alegría de sus gentes. Brindo por sus
fiestas (quizás un tanto temerarias para la salud) y por las magníficas personas que hay allí.