El viajero que llegue a
Agres ha de tomarse la visita con calma, porque sólo así podrá disfrutar del encanto de los
rincones urbanos, de los pequeños detalles. En los
paseos por Agres contaremos con la privilegiada compañía de las
fuentes, de las que manan
aguas frescas y cristalinas: "la Font del Mig", "la Fonteta", "la Font de Baix", "la Font del Raval", "la Font del Convent", etc. Agres aún conserva en perfectas condiciones un
lavadero público, al que todavía acuden algunas mujeres a limpiar su ropa.