Martí Casanova, hace la siguiente referencia: «...
Iglesia del
Santo Sepulcro y
convento de monjas Agustinas descalzas.
Calle de
San Blas, nº. 4. […], la causa ú oríjen de este convento fué el robo sacrílego perpetrado en la parroquial de
Alcoy á mediados del siglo XVI. Reconocidos al
cielo los hijos de la Villa, erijieron una
capilla con el título de el Santo Sepulcro, en el sitio mismo donde Juan Prats escondió el Sacramento; elevando en el lugar del establo un panteon cual hoy se halla. Esto se hizo siendo arzobispo de
Valencia el Escmo. Sr. D. Pedro de Loazes.