Mi mas sincero agradecimiento,
amigo Daniel, por el hecho de dejar una líneas en el
pueblo que me vio nacer, y crecer; no de el todo.
Me duele tanto silencio,: me duele porque, cuando lejos (la mitad de mi vida) deseaba regresar y recordar. Fue emotivo mi regreso, a la vez que decepcionante: los compañeros de
juegos, habían desaparecido, acudí a las
fiestas, y salvo lo de mi edad, los descendientes eran como extraños. Me sentía forastero en mi propio pueblo... nada era igual.
De esto mi agradecimiento,
... (ver texto completo)