ALICANTE CON LA LUZ DEL MEDITERRÁNEO
Alicante es elegante
lo dicen los marineros,
que la ven fresca y brillante
con signos aventureros.
Como una novia bonita
que la recibe su amante,
es esa flor exquisita,
hoy la ciudad de Alicante.
No vale buscar más rosas
por ramblas y palmerales,
veras las horas dichosas
en sus calles más normales.
La luz del Mediterráneo
brilla sobre sus colinas,
en invierno ves verano
con las horas más divinas.
La Plaza de Los Luceros
revive mil fantasías,
sin buscar los agoreros
que rompen sus melodías.
La luz dejando sus brillos
por esos bellos paisajes,
donde los pueblos sencillos
ya no quieren vasallajes.
Siento la luz en mis ojos
rellenos de sintonía,
sin querer verles tan rojos
que provoquen agonía.
Claridades del destino
sin ver a nadie arrogante,
queriendo el hilar tan fino
que admiro siempre Alicante.
Luz que brilla en la mañana
sobre el Postiguet altivo,
Alicante es vida sana
donde se vive el festivo.
G X Cantalapiedra.
Alicante es elegante
lo dicen los marineros,
que la ven fresca y brillante
con signos aventureros.
Como una novia bonita
que la recibe su amante,
es esa flor exquisita,
hoy la ciudad de Alicante.
No vale buscar más rosas
por ramblas y palmerales,
veras las horas dichosas
en sus calles más normales.
La luz del Mediterráneo
brilla sobre sus colinas,
en invierno ves verano
con las horas más divinas.
La Plaza de Los Luceros
revive mil fantasías,
sin buscar los agoreros
que rompen sus melodías.
La luz dejando sus brillos
por esos bellos paisajes,
donde los pueblos sencillos
ya no quieren vasallajes.
Siento la luz en mis ojos
rellenos de sintonía,
sin querer verles tan rojos
que provoquen agonía.
Claridades del destino
sin ver a nadie arrogante,
queriendo el hilar tan fino
que admiro siempre Alicante.
Luz que brilla en la mañana
sobre el Postiguet altivo,
Alicante es vida sana
donde se vive el festivo.
G X Cantalapiedra.