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ALICANTE TIENE PLAYAS
Las brisas vienen llegando
en las noches calurosas,
el ambiente va dejando
algunas horas dichosas.
Las playas marcan destinos
de una ciudad elegante,
que tiene bonitos signos
y de nombre es Alicante.
Playas llenas de bañistas
con arenas naturales,
olas que a veces despistan
entre sus gentes normales.
Cuando las tardes despliegan
esas brisas siderales,
muchos calores se niegan
a dejar de ser fatales.
Las playas viven su calma
entre las finas arenas,
mientras el aire reclama
poder quitar muchas penas.
Las palmeras van bailando
con ritmo de melodías,
que suelen ir alegrando
las sombras de muchos días.
Cuando llega la alborada
se notan las ilusiones,
de la gente enamorada
que no quiere confusiones.
Alicante de destino
entre brisas y leyendas,
ciudad que quiere hilar fino
en sus más bonitas sendas.
Playas que dejan señales
de vivir las alegrías,
aunque tengan ciertas sales
Alicante da armonías.
G X Cantalapiedra.
Las brisas vienen llegando
en las noches calurosas,
el ambiente va dejando
algunas horas dichosas.
Las playas marcan destinos
de una ciudad elegante,
que tiene bonitos signos
y de nombre es Alicante.
Playas llenas de bañistas
con arenas naturales,
olas que a veces despistan
entre sus gentes normales.
Cuando las tardes despliegan
esas brisas siderales,
muchos calores se niegan
a dejar de ser fatales.
Las playas viven su calma
entre las finas arenas,
mientras el aire reclama
poder quitar muchas penas.
Las palmeras van bailando
con ritmo de melodías,
que suelen ir alegrando
las sombras de muchos días.
Cuando llega la alborada
se notan las ilusiones,
de la gente enamorada
que no quiere confusiones.
Alicante de destino
entre brisas y leyendas,
ciudad que quiere hilar fino
en sus más bonitas sendas.
Playas que dejan señales
de vivir las alegrías,
aunque tengan ciertas sales
Alicante da armonías.
G X Cantalapiedra.