SI LAS PALMERAS HABLARAN
Dejar que sigan volando
en las calles de Alicante,
las palmeras van brillando
con sencillez elegante.
El Palmeral va luciendo
palmeras que son altivas,
mientras las vemos sintiendo
entre pasiones festivas.
Palmeras llenas de brisas
que suelta el Mediterráneo
sin entender de esas prisas
de su mundo subterráneo.
Las palmeras de testigos
con las caricias normales,
donde se ven los amigos
entre formas naturales.
Vientos que mueven las ramas
en los momentos fatales,
mientras los sueños reclaman
sus movimientos normales.
Palmeras que son caricias
que se guardan en el alma,
algunas son las delicias
que pudieran darnos calma.
Alicante de pasiones
con palmeras encantadas,
donde se aprenden lecciones
en las horas más cuidadas.
Sin predecir el futuro
ni buscar tardes doradas,
en cualquier momento duro
vives cosas encantadas.
Alicante se despierta
entre alegres alboradas,
la mente siempre te alerta
de vivir sendas soñadas.
G X Cantalapiedra.
Dejar que sigan volando
en las calles de Alicante,
las palmeras van brillando
con sencillez elegante.
El Palmeral va luciendo
palmeras que son altivas,
mientras las vemos sintiendo
entre pasiones festivas.
Palmeras llenas de brisas
que suelta el Mediterráneo
sin entender de esas prisas
de su mundo subterráneo.
Las palmeras de testigos
con las caricias normales,
donde se ven los amigos
entre formas naturales.
Vientos que mueven las ramas
en los momentos fatales,
mientras los sueños reclaman
sus movimientos normales.
Palmeras que son caricias
que se guardan en el alma,
algunas son las delicias
que pudieran darnos calma.
Alicante de pasiones
con palmeras encantadas,
donde se aprenden lecciones
en las horas más cuidadas.
Sin predecir el futuro
ni buscar tardes doradas,
en cualquier momento duro
vives cosas encantadas.
Alicante se despierta
entre alegres alboradas,
la mente siempre te alerta
de vivir sendas soñadas.
G X Cantalapiedra.