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Arte bueno de pintura
que se refleja en sus calles,
laderas que son cultura
donde existen mil detalles.
Pasar el tiempo en Altea
es alegre y divertido,
la pintura nunca es brea
si es pintor comprometido.
Sentir el arte en las venas
y saberlo interpretar,
comunicar las escenas
sin tenerte que inquietar.
Luces del Mediterráneo
relucen en sus miradas,
Altea no es subterráneo
ni están sus calas marcadas.
Vivir la vida en Altea
es conocer nuevo mundo,
jamás su paisaje a fea
ni lo veras nunca absurdo.
Una mirada al futuro
en estas tierras sufridas,
sin sentirse un inmaduro
por tantas horas perdidas.
Desde Altea pensativo
por sentirme aventurero,
no quiero hallar adjetivo
con la palabra extranjero.
G X Cantalapiedra.
que se refleja en sus calles,
laderas que son cultura
donde existen mil detalles.
Pasar el tiempo en Altea
es alegre y divertido,
la pintura nunca es brea
si es pintor comprometido.
Sentir el arte en las venas
y saberlo interpretar,
comunicar las escenas
sin tenerte que inquietar.
Luces del Mediterráneo
relucen en sus miradas,
Altea no es subterráneo
ni están sus calas marcadas.
Vivir la vida en Altea
es conocer nuevo mundo,
jamás su paisaje a fea
ni lo veras nunca absurdo.
Una mirada al futuro
en estas tierras sufridas,
sin sentirse un inmaduro
por tantas horas perdidas.
Desde Altea pensativo
por sentirme aventurero,
no quiero hallar adjetivo
con la palabra extranjero.
G X Cantalapiedra.