BENIDORM COMO DESTINO
Rascacielos temerosos
con sombras que te dan miedo,
ellos se ven orgullosos
sin saber cual es su credo.
Benidorm como destino
de los caminos con sueños,
que alguno llama divino
en sus instantes risueños.
Playas que viven momentos
de sentir cercano el cielo,
sin entender de lamentos
que a veces buscan consuelo.
Benidorm entre promesas
de risas que lleva el viento,
terrazas con grandes mesas
para sentir nuevo aliento.
Aires llenos de grandeza
corren dejando sus brisas,
en Benidorm la nobleza
a veces produce risas.
Estas tierras levantinas
con olores salineros,
nos parecen más divinas
en ambientes marineros.
Barcos cargados de sueños
que van buscando placeres,
sin saber si existen dueños
de sus perfectos enseres.
Brisas que llevan sorpresas
de canciones de esperanza,
donde las mentes regresan
para escuchar cualquier danza.
Es Benidorm la alegría
de muchas voces con alma,
son sus flores de armonía
un buen remanso de calma.
G X Cantalapiedra.
Rascacielos temerosos
con sombras que te dan miedo,
ellos se ven orgullosos
sin saber cual es su credo.
Benidorm como destino
de los caminos con sueños,
que alguno llama divino
en sus instantes risueños.
Playas que viven momentos
de sentir cercano el cielo,
sin entender de lamentos
que a veces buscan consuelo.
Benidorm entre promesas
de risas que lleva el viento,
terrazas con grandes mesas
para sentir nuevo aliento.
Aires llenos de grandeza
corren dejando sus brisas,
en Benidorm la nobleza
a veces produce risas.
Estas tierras levantinas
con olores salineros,
nos parecen más divinas
en ambientes marineros.
Barcos cargados de sueños
que van buscando placeres,
sin saber si existen dueños
de sus perfectos enseres.
Brisas que llevan sorpresas
de canciones de esperanza,
donde las mentes regresan
para escuchar cualquier danza.
Es Benidorm la alegría
de muchas voces con alma,
son sus flores de armonía
un buen remanso de calma.
G X Cantalapiedra.