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EL PEÑÓN DE IFACH Y SUS MISTERIOS
Cuando las nubes se pegan
sobre su cima flamante,
muchos sueños se despliegan
en cualquier bonito instante.
Sentir las brisas marinas
en sus laderas brillantes,
con gaviotas peregrinas
entre vuelos expectantes.
Piedras que marcan los miedos
de sus muchos caminantes,
El Peñón tiene sus credos
que parecen arrogantes.
Fotos por todos sus lados
con sus distintos paisajes,
hay momentos encantados
que tienen fuertes anclajes.
Pasar debajo sus piedras
a veces es delirante,
no se notan hoy las hiedras
ni escritos de algún amante.
El Peñón tiene reflejos
en las noches distinguidas,
sus rutas tienen complejos
de las cabras atrevidas.
Este Peñón es historia
de muchísimas culturas,
que se lleva en la memoria
para anular amarguras.
Ifach marcando locuras
entre sus senderos viejos,
donde se notan diabluras
en las visiones de lejos.
Calpe suspira mirando
ese Peñón de dulzuras,
con brillos que van notando
muchas de sus singladuras.
G X Cantalapiedra.
Cuando las nubes se pegan
sobre su cima flamante,
muchos sueños se despliegan
en cualquier bonito instante.
Sentir las brisas marinas
en sus laderas brillantes,
con gaviotas peregrinas
entre vuelos expectantes.
Piedras que marcan los miedos
de sus muchos caminantes,
El Peñón tiene sus credos
que parecen arrogantes.
Fotos por todos sus lados
con sus distintos paisajes,
hay momentos encantados
que tienen fuertes anclajes.
Pasar debajo sus piedras
a veces es delirante,
no se notan hoy las hiedras
ni escritos de algún amante.
El Peñón tiene reflejos
en las noches distinguidas,
sus rutas tienen complejos
de las cabras atrevidas.
Este Peñón es historia
de muchísimas culturas,
que se lleva en la memoria
para anular amarguras.
Ifach marcando locuras
entre sus senderos viejos,
donde se notan diabluras
en las visiones de lejos.
Calpe suspira mirando
ese Peñón de dulzuras,
con brillos que van notando
muchas de sus singladuras.
G X Cantalapiedra.