CUANDO LAS BRISAS TE ALEGRAN
Estos calores llegados
sin avisar de sus fines,
nos parecen endiablados
en estos bellos confines.
Calpe lo va resistiendo
con sus playas bien llenadas,
el calor viene exigiendo
sus cotas en madrugadas.
El Mediterráneo altivo
nota siempre las frescuras,
es algo que se motiva
en las horas más nocturnas.
Brisas que corren las calles
y las grandes avenidas,
donde se viven detalles
de sus rachas bien venidas.
Estos calores marchosos
que dejan sus grandes huellas,
pocas veces son dichosos
al no dejar horas bellas,
El Peñón sigue observando
los calores veraniegos,
que detrás vienen dejando
algunos bonitos ruegos.
Las brisas son esperadas
por las gentes más marchosas,
en ciertas horas pasadas
hubo brisas deliciosas.
Calpe mirando su cielo
sin ver nubes tormentosas,
las brisas son el consuelo
de las noches azarosas.
Brisas que marcan las tardes
de sus ritmos deliciosos,
esos vientos sin desmadres
siempre fueron armoniosos.
G X Cantalapiedra.
29 – 7 – 2020.
Estos calores llegados
sin avisar de sus fines,
nos parecen endiablados
en estos bellos confines.
Calpe lo va resistiendo
con sus playas bien llenadas,
el calor viene exigiendo
sus cotas en madrugadas.
El Mediterráneo altivo
nota siempre las frescuras,
es algo que se motiva
en las horas más nocturnas.
Brisas que corren las calles
y las grandes avenidas,
donde se viven detalles
de sus rachas bien venidas.
Estos calores marchosos
que dejan sus grandes huellas,
pocas veces son dichosos
al no dejar horas bellas,
El Peñón sigue observando
los calores veraniegos,
que detrás vienen dejando
algunos bonitos ruegos.
Las brisas son esperadas
por las gentes más marchosas,
en ciertas horas pasadas
hubo brisas deliciosas.
Calpe mirando su cielo
sin ver nubes tormentosas,
las brisas son el consuelo
de las noches azarosas.
Brisas que marcan las tardes
de sus ritmos deliciosos,
esos vientos sin desmadres
siempre fueron armoniosos.
G X Cantalapiedra.
29 – 7 – 2020.