POR QUÉ TE VINISTE A CALPE
Por qué te viniste a Calpe, en una fecha marcada, si no precisas escape ni buscas noche encantada. “En esta costa preciosa donde ves olas soñadas, puedes lograr cierta rosa entre brisas despistadas”. La pregunta corre libre no precisa conclusiones, alguna pena se escribe sin hablar de confusiones. Por qué te viniste a Calpe sin preguntar tan siquiera, es posible que te atrape soñando con primavera. El hombre buscó las sombras de las palmeras hermosas, y descubrió que te asombras al ver sus rutas dichosas. Sin contestar al destino, ni preguntar muchas cosas, pensó que ningún mal signo era vivir entre rosas. Viviendo las vibraciones de sus tardes orgullosas, supo de muchas razones que nunca serán viciosas. Las vanidades del viento se pierden en lejanía, y pueden romper aliento más te dejan armonía. Nadie puede poner freno cuando disfrutas tu vida, sin querer beber veneno la noche se vuelve erguida. Puedes sentir las diabluras de ver la noche anhelada, y pensar en las locuras de alguna mente obcecada. Todo presiente la noche, cuando la vida te marca, mientras que ves el derroche si algún complejo se aparca. Cuando el destino te lleva a las costas embrujadas, sientes que el alma se eleva a sensaciones soñadas. No debes seguir pensando en las noches endiabladas, en Calpe veras brillando a gentes enamoradas. Si te viniste soñando al pensar en la alborada, seguro que vas cantando en tu senda bien pisada. Deja que llegue la noche, con su Luna tan mirada, no quieras poner el broche a esta tierra iluminada. No quieras ser vanidoso ni buscar torre admirada, y menos siendo orgulloso que busque senda adorada. Calpe te regala vida en sus tardes muy soñadas, es esa costa elegida que hace grandes las andadas. G X Cantalapiedra.
Por qué te viniste a Calpe, en una fecha marcada, si no precisas escape ni buscas noche encantada. “En esta costa preciosa donde ves olas soñadas, puedes lograr cierta rosa entre brisas despistadas”. La pregunta corre libre no precisa conclusiones, alguna pena se escribe sin hablar de confusiones. Por qué te viniste a Calpe sin preguntar tan siquiera, es posible que te atrape soñando con primavera. El hombre buscó las sombras de las palmeras hermosas, y descubrió que te asombras al ver sus rutas dichosas. Sin contestar al destino, ni preguntar muchas cosas, pensó que ningún mal signo era vivir entre rosas. Viviendo las vibraciones de sus tardes orgullosas, supo de muchas razones que nunca serán viciosas. Las vanidades del viento se pierden en lejanía, y pueden romper aliento más te dejan armonía. Nadie puede poner freno cuando disfrutas tu vida, sin querer beber veneno la noche se vuelve erguida. Puedes sentir las diabluras de ver la noche anhelada, y pensar en las locuras de alguna mente obcecada. Todo presiente la noche, cuando la vida te marca, mientras que ves el derroche si algún complejo se aparca. Cuando el destino te lleva a las costas embrujadas, sientes que el alma se eleva a sensaciones soñadas. No debes seguir pensando en las noches endiabladas, en Calpe veras brillando a gentes enamoradas. Si te viniste soñando al pensar en la alborada, seguro que vas cantando en tu senda bien pisada. Deja que llegue la noche, con su Luna tan mirada, no quieras poner el broche a esta tierra iluminada. No quieras ser vanidoso ni buscar torre admirada, y menos siendo orgulloso que busque senda adorada. Calpe te regala vida en sus tardes muy soñadas, es esa costa elegida que hace grandes las andadas. G X Cantalapiedra.