CUANDO BRILLAN LAS ESTRELLAS EN CALPE
Las noches llegan vibrando en las torres fabulosas, el aire sigue azotando en las horas más dichosas. Viendo brillar las estrellas entre brisas deliciosas, comprendes las tardes bellas y buscas flores hermosas. Vamos mirando El Peñón con sus reflejos marinos, y notamos la razón de sus momentos más finos. El mar nos va reflejando entre las olas agudas, es algo que va calando dejando huellas profundas. Las noches son deliciosas si divisas la bahía, queriendo gozar las cosas que derrochan simpatía. Estas tierras levantinas que te llenan de alegría, tienen bonitas colinas entre signos de armonía. Pisar las playas de Calpe entre grandes claridades, es lograr tener escape para gozar de verdades. El mar se llena de estelas en las noches luminosas, donde brillas las estrellas sin buscar flores hermosas. Sentir las noches sin prisa contemplando su paisaje, es poder gozar la brisa sin buscar ningún anclaje. Tardes que vienen dejando sus enormes melodías, con aires que van silbando en perfecta sintonía. Las palmeras van bailando, entre brisas de alborada, dicen que siguen pensando en esta tierra adorada. Calpe te marca distancia en sus noches bullangueras, siempre existe la arrogancia de personas altaneras. La pandemia sigue activa para dejarnos sus huellas, ella siempre se motiva aunque brillen las estrellas. Amarrados a la vida para frenar ciertos males, la ruta no está perdida en estos casos fatales. No perdamos los papeles, sin pensar en dulces días, ni nos sentimos infieles ni busquemos la agonía. Vivamos soñando vida para divisar estrellas, la esperanza siempre erguida nos hará las noches bellas. G X Cantalapiedra.
Las noches llegan vibrando en las torres fabulosas, el aire sigue azotando en las horas más dichosas. Viendo brillar las estrellas entre brisas deliciosas, comprendes las tardes bellas y buscas flores hermosas. Vamos mirando El Peñón con sus reflejos marinos, y notamos la razón de sus momentos más finos. El mar nos va reflejando entre las olas agudas, es algo que va calando dejando huellas profundas. Las noches son deliciosas si divisas la bahía, queriendo gozar las cosas que derrochan simpatía. Estas tierras levantinas que te llenan de alegría, tienen bonitas colinas entre signos de armonía. Pisar las playas de Calpe entre grandes claridades, es lograr tener escape para gozar de verdades. El mar se llena de estelas en las noches luminosas, donde brillas las estrellas sin buscar flores hermosas. Sentir las noches sin prisa contemplando su paisaje, es poder gozar la brisa sin buscar ningún anclaje. Tardes que vienen dejando sus enormes melodías, con aires que van silbando en perfecta sintonía. Las palmeras van bailando, entre brisas de alborada, dicen que siguen pensando en esta tierra adorada. Calpe te marca distancia en sus noches bullangueras, siempre existe la arrogancia de personas altaneras. La pandemia sigue activa para dejarnos sus huellas, ella siempre se motiva aunque brillen las estrellas. Amarrados a la vida para frenar ciertos males, la ruta no está perdida en estos casos fatales. No perdamos los papeles, sin pensar en dulces días, ni nos sentimos infieles ni busquemos la agonía. Vivamos soñando vida para divisar estrellas, la esperanza siempre erguida nos hará las noches bellas. G X Cantalapiedra.