CALPE: LLEGÓ SOLO A CALPE...

LLEGÓ SOLO A CALPE
Como huyendo del destino, como un perro callejero, soñando ser adivino en ese mundo embustero, Aquel hombre que sabía ser culpable de un empeño, empezó su hipocresía, sin hablar del vil dinero. Llegó a Calpe para lograr esconderse de aquel vivir entre miedo, que la mafia le imponía, en su terrible mal juego, se buscó un apartamento que le alquilo por dinero, y caminó recordando que su rumbo era embustero. Noches de miedo entre sombras, por sus buscados senderos, luces que a veces le asombran en sus pasos trafulleros. La noche siempre escondido, a veces a ras del suelo, sin verse nunca perdido, a nadie pidió consuelo. Pasaron más de tres años, sin que terminase el vuelo, mientras le fueron buscando por diferentes senderos. Sin coche andaba sus pasos de terror por verse muerto, a la playa ni bajaba al ver su presente incierto, Su pasado era penumbra, su mañana muy quebrado, la muerte no estaba ausente en su mundo dislocado, Miraba bien su cartera, el dinero iba volado, su vivir siempre en primera le daba un mundo quebrado. Sin saber dónde marcharse, como un perro solitario, Benidorm para alejarse seria mucho calvario. Recogiendo su maleta sin ver su camino largo, en Denia llegó alistarse en un barco navegando. Se fue buscando el olvido, sin poder nunca encontrarlo, era un hombre mal herido, que fue su rumbo amargarlo. Navegando por los mares, de nombre se fue cambiando, eran penosos sus males, más nunca logro arreglarnos. En los mares logró olvido, a veces con soledades, siendo su rumbo perdido sin poder contar verdades. Navegando mar adentro por diferentes lugares, su temor era ese centro que anula tener hogares. Fueron años de penumbras, incluso en el bello Calpe, cuando las dudas alumbran no puedes buscar escape. No conocemos la historia, ni su destino en los mares, se me vino a la memoria esta historia con sus males. Cuando afloran los peligros, por muchas causas fatales, la vida pega sus giros que pudieran ser mortales. Nadie se encuentra seguro, incluso dentro en los mares, cuando el pasado fue duro pueden aflorar los males. G X Cantalapiedra.