La Basílica Menor de
Santa María o
Iglesia Arciprestal de Nuestra Señora de la Asunción fue construida sobre la antigua mezquita de época musulmana, entre los siglos xvii y xviii. Es un claro ejemplo del barroco español. Las obras se iniciaron en 1672 bajo la dirección de Francisco Verde, sucediéndole Pedro Quintana y Ferrán Fouquet. Sus tres
portadas son obra del
escultor Nicolás de Bussy entre 1680-1682. Durante la guerra civil, fue parcialmente destruida, siendo restaurada años después por el arquitecto ilicitano Antonio Serrano Peral. La
capilla de la
Comunión fue diseñada en 1782 por Lorenzo Chápuli. El tabernáculo del
altar mayor fue realizado en mármol en la ciudad de Nápoles y diseñado por Jaime Bort.