En la época de la reconquista cristiana Monforte aparece con el nombre de “Nompot”. Dado a los acontecimientos de esta época convivían los moros (mudéjares) y los cristianos, por lo que se tuvo que crear la morería para que cada comunidad tuviera su lugar para vivir en armonía y con el objetivo de repoblar la
huerta alicantina. En la guerra de los “Pedros” Monforte pasó a formar parte durante poco tiempo a Castilla, y cuando volvió a ser propiedad de la corona de
Aragón se le denominó “Monfort”; (
monte fuerte) debido a la fortaleza donde hoy existe la
iglesia. Por fin se queda con
Monforte del Cid aludiendo a una
sierra del municipio y así poder diferenciarlo de otros municipios llamados Monforte.
En el s. XVIII, Felipe V concede al municipio el Toisón de Oro y el título de villa leal y fiel, debido a que siempre se mantuvo fiel al bando borbónico.
MONFORTE: v. con ayunt. y adm. subalterna de
correos, en la prov. de
Alicante (4 1/2 horas), part. jud. de
Novelda (1/2), aud. terr. y c. g. de
Valencia (30), dióc. de Orihuela (7). SIT. en terreno llano, a la der. del r. Vinalapó o
Rambla de Novelda: la baten todos los vientos; su CLIMA es templado, y las enfermedades más comunes intermitentes. Tiene 823
CASAS, un pósito de granos para labradores,
escuela de niños a la que concurren 84, dotada con 1,900 rs., otra de niñas sin dotación, concurrida por 80; un ant. cast. sobre el que está fundada la igl. parr. dedicada a Ntra. Sra. de las Nieves, de segundo ascenso, servida por un cura, dos vicarios y un beneficiado de sangre; el curato y primera vicaría son de provisión real o del ordinario, según el mes de la vacante en riguroso concurso, y la otra vicaría nutual de nombramiento del ordinario; un conv. extramuros a la dist. de 3/4 de hora de la pobl., que perteneció a la orden de
San Francisco de la reforma de San Pedro Alcántara, cuyo
edificio no tiene destino alguno, si bien en el templo se celebra misa para los labradores del
campo; tres
ermitas con la advocación de San Pascual, San Roque y la Sangre de
Cristo, sit. la primera en la cumbre del monte de su nombre, donde es
tradición existió la
cueva donde el
santo, cuando era pastor del conv. suprimido, hacia oración; un
cementerio cerca del
pueblo hacia el O.; 600
pozos de
agua manantial y dulce en las casas para su consumo y servicio, y tres
fuentes para el abasto del vecindario, siendo de mencionarse la muy abundante titulada del
Caño, cuyas
aguas sirven también para regar las huerta. Confina el TÉRM. por N. con los de Petrel y
Agost; E. el de Alicante; S. los de
Elche y
Aspe, y O. el de Novelda. En su radio se encuentran algunos
montes que forman pequeñas cord., menos por el lado occidental, las cuales contienen buenos pastos. El TERRENO es llano en su mayor parte; se cultivan sobre 26,000 tahúllas, que son de buena calidad, especialmente su frondosa, aunque reducida huerta, que fertiliza la
fuente mencionada. Los
CAMINOS son carreteros y dirigen a Alicante,
Monóvar, Novelda y
Elda, que es la
carretera de
Madrid; su estado es regular. El
CORREO lo recibe en su adm. por el conductor general tres veces a la semana cada una de las carreras de Madrid y Alicante. PROD.: toda clase de cereales, y lo que más abunda son higos, algarrobas y vino: mantiene poco
ganado lanar. IND.: la agrícola, algunas fáb. de aguardiente, tres
molinos harineros y una almazara para el aceite.
COMERCIO: los art. de consumo que se exportan son, las harinas para Alicante y otros
pueblos, y los higos para la Mancha; se importan viandas y otros ramos de que carecen. Se celebra una
feria o
romería en los días 7 y 8 de setiembre por la
fiesta de Ntra. Sra. de Loreto, y el art. de más tráfico en ella es el cáñamo en rama y rastrillado, que en un año de buena cosecha en los pueblos comarcanos, pasa su valor de 200,000 rs. PORL.: 793 vec, 3,158 alm. CAP. PROD.: 2.933,500 rs. IMP: 179,943. CONTR. 42,061: el PRESUPUESTO MUNICIPAL asciende a 25,317 rs., que se cubre con varios propios y arbitrios que disfruta la v., y el déficit por reparto vecinal.
* Diccionario geográfico – estadístico - histórico de
España y sus posesiones de Ultramar. Pascual Madoz, 1847.