Efectivamente es una aldea preciosa. Tengo una vivencia imborrable: Creo que fué durante la
Semana Santa del año 1998, con un nutrido grupo de compañeros, amantes del
deporte de aventura y la
montaña, organizamos una pateada desde
Fredes hasta el nacimiento del
rio Matarraña (la Font del Teix) y desde allí, bajando por el cauce (mejor dicho, barranco) del rio, hasta el Parrizal de
Beceite. ¡Fantástico!.
A mediados de septiembre he vuelto y está casi todo igual. Después de una suculenta
comida ... (ver texto completo)