De nuevo soy Vicente Martí, aunque me había propuesto no escribir más, porque no me gusta hablar con quien no de la cara. Pero quiero decirle, sin ninguna acritud, a quien me invita a "volver a casa", que es dificil volver a donde nunca se ha estado. Como mucho, se puede ir, pero no volver. Y conste que lo digo sin saber cual es esa casa. Mi casa es, o pretendo que lo sea, la sinceridad, la honradez y la concordia con mis vecinos. Podré discrepar en cuanto a ideologias, pero no por ello dejaré de respetarlas. Hago mía la frase "No estoy de acuerdo en nada de lo que dices, pero daría mi vida, si fuera preciso, para que puedas seguir diciendolo". En esta frase se encierra mi sentido de democracia, aunque por lo que observo debo ser un bicho muy raro, ya que solo veo insultos y descalificaciones personales por todas partes.Me parece lamentable.