Un viejito va al
médico y le pide que le recete Viagra. El médico le dice:
-No hay problema. ¿Cuántas quiere que le recete? El hombre le contesta:
-Sólo unas pocas, tal vez cuatro pero cada una cortada en 4 partes.
-Pero así no le servirá de mucho- dice el doctor. El viejito argumenta:
-Claro que sí, como tengo más de 90 años no las necesito solamente para el sexo, las quiero para que al orinar, se me estire un poquito más y así no mojarme los zapatos…