preciosos azules Dos azules de la Naturaleza Amor, amor, un hábito vestí
el cual de vuestro paño fue cortado;
al vestir ancho fue, más apretado
y estrecho cuando estuvo sobre mí.
Después acá de lo que consentí,
tal arrepentimiento me ha tomado,
que pruebo alguna vez, de congojado,
a romper esto en que yo me metí.
... FALSOS
- ¡Oye, Oye!, pero, ¿por qué golpeas a ese maniquí?
- ¡Arrrrrrrg!. ¡Es que no soporto a la gente falsa! Sólo un buen amigo es capaz de comprender que su presencia puede llegar a molestarnos.