PEPA
NIEBLA de LUCA de TENA.
CONTRAPUNTO:
La
playa era larga y estrecha. Cubría en longitud cuanto abarcaba la vista. Pero desde la orilla hasta esa zona amorfa en que la arena deja de ser playa, donde nacen los
cactus y los espinos, apenas había sitio para las
barcas de los pescadores, varadas en tierra. Recuerdo infinidad de conchas de caracolas rotas... Pocas cosas hay tan tristes como una playa solitaria y abandonada. PEPA NIEBLA ES LA HABITANTE INTRUSA DE ESTA PLAYA, es el polizón de esta nave desvencijada y piensa en PEPA NIEBLA, en su ternura y en que es una loca mendiga de amor.