Una mujer estaba acompañando en el hospital a su marido, que salía del estado de coma en que había caído hacía varios meses. Ella, había permanecido a su lado todos los días, esperando su recuperación y cuando finalmente volvió en si, el le pidió que se acercara y con lagrimas en los ojos, le susurró: Querida: has estado conmigo siempre en las malas. Cuando fuí despedido estabas ahí para apoyarme; cuando quebró mi negocio, estabas ahí; cuando me dispararon, continuaste ahí; cuando perdimos la casa, permaneciste a mi lado; cuando me detuvieron, no me fallaste; cuando mi salud comenzó a fallar, seguías a mi lado, ¿sabes qué?...
Dime mi vida, contestó la mujer.
Creo que me traes mala suerte.......
Dime mi vida, contestó la mujer.
Creo que me traes mala suerte.......
Y Cristina y acuario haciéndonos sonreir.