CARACTERÍSTICAS
Forma: aunque su forma puede ser globular u ovoide, dependiendo de las variedades, generalmente tiene forma de corazón.
Tamaño y peso: de 7,5-12,5 centímetros de longitud, su peso oscila entre los 150-1.000 gramos.
Color: presenta una piel reticulada de color verde y una pulpa blanca de consistencia cremosa. Contiene numerosas semillas aplastadas de color negro que miden aproximadamente 1 centímetro de longitud.
Sabor: la pulpa, refrescante, muy aromática y de sabor dulce, ligeramente ácido, recuerda a la mezcla de piña tropical y plátano o al sabor de la pera.
La recolección tiene lugar cuando se produce un cambio en la coloración de la fruta, adquiriendo ésta un tono más claro, pero aún firme, con el fin de reducir los problemas de transporte y conservación. Tras su cosecha, se debe conservar a una temperatura de unos 8-10ºC, que permite mantener la cadena comercial durante dos semanas. En cuanto a las condiciones de conservación y almacenamiento, se debe tener en cuenta que son frutas climatéricas. En lo que se refiere a su envasado, las chirimoyas deben presentarse en los siguientes tipos de envases: las categorías Extra y I se envasan en cajas de 32 por 50 centímetros ó de 30 por 40 de base y acondicionadas en una sola capa. Las categorías II y III se envasan en cajas que no sobrepasan los 15 kilogramos.
Forma: aunque su forma puede ser globular u ovoide, dependiendo de las variedades, generalmente tiene forma de corazón.
Tamaño y peso: de 7,5-12,5 centímetros de longitud, su peso oscila entre los 150-1.000 gramos.
Color: presenta una piel reticulada de color verde y una pulpa blanca de consistencia cremosa. Contiene numerosas semillas aplastadas de color negro que miden aproximadamente 1 centímetro de longitud.
Sabor: la pulpa, refrescante, muy aromática y de sabor dulce, ligeramente ácido, recuerda a la mezcla de piña tropical y plátano o al sabor de la pera.
La recolección tiene lugar cuando se produce un cambio en la coloración de la fruta, adquiriendo ésta un tono más claro, pero aún firme, con el fin de reducir los problemas de transporte y conservación. Tras su cosecha, se debe conservar a una temperatura de unos 8-10ºC, que permite mantener la cadena comercial durante dos semanas. En cuanto a las condiciones de conservación y almacenamiento, se debe tener en cuenta que son frutas climatéricas. En lo que se refiere a su envasado, las chirimoyas deben presentarse en los siguientes tipos de envases: las categorías Extra y I se envasan en cajas de 32 por 50 centímetros ó de 30 por 40 de base y acondicionadas en una sola capa. Las categorías II y III se envasan en cajas que no sobrepasan los 15 kilogramos.