Dame tu canto, sol, dame la vida
en la dulce bondad de la mañana.
Quiero, boca, tu beso de manzana
que endulce mi sonrisa florecida.
Quiero tu voz ardiendo en la encendida
claridad de la música que hermana
con el silencio su ala de campana
en ave que transita detenida.
Quiero tu beso, voz; tu canto, trino;
tu caricia sonora, labio ajeno;
tu palabra vidente y su sereno
cuerpo de inquieto y lacerante vino,
para beberlo en vaso donde fuera
sed que consume torturante espera.
Carmen González Huguet
en la dulce bondad de la mañana.
Quiero, boca, tu beso de manzana
que endulce mi sonrisa florecida.
Quiero tu voz ardiendo en la encendida
claridad de la música que hermana
con el silencio su ala de campana
en ave que transita detenida.
Quiero tu beso, voz; tu canto, trino;
tu caricia sonora, labio ajeno;
tu palabra vidente y su sereno
cuerpo de inquieto y lacerante vino,
para beberlo en vaso donde fuera
sed que consume torturante espera.
Carmen González Huguet