Me gusta, voy cada dos o tres años y me encanta el tipo de vida de este
pueblo tan encantador, puedes ir a la
playa o quedarte en el pueblo y ser un lugareño mas, mis
paseos nocturnos por el
paseo son un bálsamo para el cuerpo y la mente, cuando andas entre la sestatuas de arena o por la orilla, aunque creo que tiene razon el admirador que se queja de los
carteles, cuando estas dentro no te acuerdas de ellos, este año iré, tengo ya apartamento y disfrutaré de ese bello lugar, un saludo desde
Barcelona.