¿tienes una peluquería?



José Zorrilla

ORIENTAL

Dueña de la negra toca,
la del morado monjil,
por un beso de tu boca
diera a Granada Boabdil.

Diera la lanza mejor ... (ver texto completo)
Confiese todo el mundo su pecado.
Yo crüel, sanguinario, he devorado
inocentes corderos,
ya vacas, ya terneros,
y he sido, a fuerza de delito tanto,
de la selva terror, del bosque espanto».
«Señor», dijo la zorra, «en todo eso
no se halla más exceso
que el de vuestra bondad, pues que se digna
de teñir en la sangre ruin, indigna, ... (ver texto completo)
Los cortesanos claman: «Este, éste
irrita al cielo, que nos da la peste».
Pronuncia el rey de muerte la sentencia,
y ejecutóla el lobo a su presencia.

Te juzgarán virtuoso
si eres, aunque perverso, poderoso;
y aunque bueno, por malo detestable
cuando te miran pobre y miserable.
Esto hallará en la corte quien la vea, ... (ver texto completo)
Félix María de Samaniego

LOS ANIMALES CON PESTE

En los montes, los valles y collados,
de animales poblados,
se introdujo la peste de tal modo,
que en un momento lo inficiona todo.
Allí donde su corte el león tenía,
mirando cada día ... (ver texto completo)
Confiese todo el mundo su pecado.
Yo crüel, sanguinario, he devorado
inocentes corderos,
ya vacas, ya terneros,
y he sido, a fuerza de delito tanto,
de la selva terror, del bosque espanto».
«Señor», dijo la zorra, «en todo eso
no se halla más exceso
que el de vuestra bondad, pues que se digna
de teñir en la sangre ruin, indigna, ... (ver texto completo)
Félix María de Samaniego

LOS ANIMALES CON PESTE

En los montes, los valles y collados,
de animales poblados,
se introdujo la peste de tal modo,
que en un momento lo inficiona todo.
Allí donde su corte el león tenía,
mirando cada día ... (ver texto completo)
Con este pensamiento
enajenada, brinca de manera
que a su salto violento
el cántaro cayó. ¡Pobre Lechera!
¡Qué compasión! Adiós leche, dinero,
huevos, pollos, lechón, vaca y ternero.

¡Oh loca fantasía!
¡Qué palacios fabricas en el viento!
Modera tu alegría, ... (ver texto completo)
Félix María de Samaniego

LA LECHERA

Llevaba en la cabeza
una Lechera el cántaro al mercado
con aquella presteza,
aquel aire sencillo, aquel agrado,
que va diciendo a todo el que lo advierte
« ¡Yo sí que estoy contenta con mi suerte!»
Félix Grande

Del árbol de los tiempos

Del árbol de los tiempos nos hemos desprendido
bajo todo un sistema de galaxias de años;
y ahora estamos mirándonos y nos vemos extraños
igual que dos océanos que se hubieran unido;

hemos viajado tanto, es tan hondo el misterio ... (ver texto completo)
En cuanto a la adversidad, dificilmente la soportarías si no tuvieras un amigo que sufriese por ti más que tu mismo (Marco Tulio Cicerón)
Viuda y rica: el estado perfecto de la mujer (George Sand)
Cuando se ve de cerca a la muerte, la vida se te hace mucho más dulce (Kirk Douglas)
Toda el agua del los ríos no bastaría para lavar la mano ensagrentada de un homicida (Esquilo)
Viuda y rica: el estado perfecto de la mujer (George Sand)
El olvido es señal de menosprecio, y por tanto causa enojo (Aristóteles)
Toda el agua del los ríos no bastaría para lavar la mano ensagrentada de un homicida (Esquilo)
El olvido es señal de menosprecio, y por tanto causa enojo (Aristóteles)
En verdad si no fuera por la música, habría más razones para volverse loco (Piotr Illich Chaikovski)
Donde no hay vino no hay amor (Euripides)
En verdad si no fuera por la música, habría más razones para volverse loco (Piotr Illich Chaikovski)
La calidad literaria es inversamente proporcional al número de lectores (Juan Benet)
Siempre es tarde cuando se llora (Cayo Salustio)