Foto de Vicente MR
Arcoíris
Un arcoíris o
arco iris es un fenómeno óptico y meteorológico que consiste en la aparición en el
cielo de un arco (en ocasiones, dos o más) de luz multicolor, originado por la descomposición de la luz solar en el espectro visible, la cual se produce por refracción, cuando los rayos del sol atraviesan pequeñas gotas de
agua contenidas en la atmósfera terrestre. Es un arco compuesto de
arcos concéntricos de
colores, sin solución de continuidad entre ellos, con el rojo hacia la parte exterior y el violeta hacia el interior. A altitud suficiente, por ejemplo cuando se viaja en avión, el arcoíris se puede observar en forma de círculo completo.
Es de menos frecuencia el arcoíris doble, el cual incluye un segundo arco externo y más tenue con los colores invertidos, es decir, el rojo hacia el interior y el violeta hacia el exterior. Si bien el arcoíris es un gradiente continuo de colores espectrales, se considera que estos pueden definirse en siete colores fundamentales: rojo, naranja, amarillo, verde, cian, azul y violeta, los cuales equivalen a los mencionados por el científico Isaac Newton en 1704 (rojo-naranja-amarillo-verde-a zul-añil-violeta, respectivamente). En el sistema RGB, que es un modelo de colores luz, corresponde a tres colores primarios, dos secundarios y dos terciarios
El
Puerto de
Catarroja
Es uno de los principales accesos a la Albufera. Ha sido punto de enlace y de unión a través de la navegación con otras localidades en la época en que el resto de las comunicaciones eran insuficientes. Uno de los lugares más importantes con el que cuenta el Port es el embarcadero que ejerce de eje del Port y del
paseo.
Este puerto es el lugar ideal para acceder a la Albufera y disfrutar de la
naturaleza.
El Puerto de Catarroja, junto al
lago de la Albufera, en él se conservan
edificios como:
Casa Sulema, Casa Baina y Casa Primitiva, salvadas de la especulación, de las cuales la única que conserva su singularidad es casa Sulema.
Tradiciones
En la Albufera, y en sus
puertos, la vida no se entiende sin los usos de las
barcas -bien con pértiga o cuerda- para la
pesca, la
caza, el transporte, la
agricultura, etc. Según los usos de estas
embarcaciones, se construían diferentes tipos de barcas, como la
barca, el barquet, el barquetot, el marimatxo o el ravatxol. Alrededor de la construcción de las barcas existen varios oficios, como el carpintero de ribera o maestro de aixà, el calafat, el velero y el cordeller. En esta tarea se utilizan diferentes herramientas como las garlopes, l'aixa, les barrenes, els gats, el rosset, les serres, les esquadres, el punta corrent, les paletes i el martell de calafat. El abandono progresivo de este medio de transporte,
fruto de la aparición de los medios de comunicación terrestre y el progresivo deterioro del medio natural en el cual se desarrollaba la barca como medio de transporte, ha ayudado al hecho que, tanto la profesión de calafat, como los usos de la barca sean casi exclusivos de unos pocos, que por herencia o por un interés particular han conservado este medio de transporte y de vida. La
embarcación más emblemática de la zona era la Vela Latina que se utiliza en la zona desde el s. II a. C. Esta embarcación a vela triangular aprovechaba las características del lago con las corrientes de vientos que lo caracterizan. A día de hoy, este elemento se intenta recuperar, buscando su conservación para mantener la
tradición con una finalidad recreativa. En Catarroja, cuando llega septiembre, se produce una cita ineludible en el calendario que centra las miradas en el Puerto de Catarroja. Varias embarcaciones llegadas desde
Silla, El Palmar y la propia Villa de Catarroja, se remontan a los antiguos sistemas de pesca y navegación para competir con habilidad y dominio del viento en la exhibición de Vela Latina.
La pesca era uno de los recursos principales del Port. El condicionante del entorno natural ha hecho que los usos de aparatos y las artes de pesca utilizadas sean específicos, debido a la morfología del lago, que es de poca profundidad. La pesca se realiza a la luz, con caña larga o corta, y con diferentes clases de redes como por ejemplo: mornella, mornells, mico, monot, etc. El Port cuenta con varias asociaciones ligadas a la pesca y la navegación de la albufera que mantienen esta tradición.
El cultivo del arroz tiene un interés más allá del gastronómico. Durante su ciclo, hace cambiar el Port y el espacio donde se encuentra. Cuando se prepara el
campo para su siembra por el fangueig, la mezcla del barro y la paja son un
reflejo de la esencia de esta tierra. Después, la inundación convierte los
campos en
espejos donde se refleja el cielo de la Albufera. En enero y febrero empieza el ciclo del arroz vaciando los campos de agua. Se empieza a fanguejar, labrando y mezclando la paja de la cocida anterior con el barro y se deja descansar la tierra hasta abril. Cuando llega la
primavera y hasta julio, se vuelven a inundar los campos de agua y se prepara para la siembra. Es en este momento cuando el marjal recibe el mayor número de visitas de aves en su ciclo migratorio en busca de alimento. Desde final de
verano hasta septiembre se secan los campos y se hace la cosecha del arroz. Después, los campos vuelven a inundarse de agua al cerrar las compuertas de la Albufera, finalizando de este modo el ciclo del arroz.
Catarroja es el lugar idóneo para probar la cocina típica valenciana, dado que la gastronomía autóctona posee un
recetario tradicional con una gran variedad de platos elaborados con productos de la
huerta y, sobre todo, arroces. La combinación de alimentos típicos permite cocinar platos basados en el arroz que son sensacionales y un placer incluso para los paladares más exigentes, como la sartén, el arroz con judías y nabos o el clásico arroz negro. Pero el plato más característico del Port de Catarroja, como hemos dicho anteriormente, es el allipebre. Por ello, Catarroja tiene una marca, siendo así que el
pueblo sea conocido como: la Cuna de l'allipebre. Catarroja, celebra cada mes de septiembre, desde 1970, el internacionalmente conocido como Concurso de Allipebre, pero siempre con la
receta tradicional.