Claro, si a los señores no les gusta lo que se dice sobre
Cullera, te quitan la nota. Buah, es tanto mi desprecio hacia la gente de esta ciudad, que no pienso volver a mandar ningún
mensaje más. Así se la coman ellos solitos. Y que les proteja la Mare de Déu del Castell, como tan ridículamente preside esta página absurda.