OLIVA: NAZARENO...

NAZARENO

Suena a lo lejos un llanto
de clarines y tambores,
como cada viernes santo
desde el viernes de dolores.
Ya se apercibe el murmullo
de la gente que se inquieta,
cuando al paso de Jesús
se lamenta una saeta.

Morado el manto aletea
y el cabello se estremece,
ante magnifica imagen
que tal que viva parece.
Y al paso del Nazareno
con la cruz a cuestas, sientes,
que largo camino el suyo
hasta el monte de la muerte.

El rostro apesadumbrado
por nuestro pecar latente,
la mirada dolorida
y al tiempo benevolente.
Hay en ti tanta bondad,
tanto a los hombres tu amas,
que por redimir sus culpas
llevas la cruz a la espalda.

Son años que se cumplen
de tu imagen renovada,
son años luchando
tus cofrades te acompañan.
Son muchos tu bien sabes
que te siguen y te guardan
para que nada te falte
en cada Semana Santa.

En este año de gloria
la paz se ha soliviantado,
se oyen sonidos de guerra,
el mundo está equivocado.

Ruego pues, mi Señor
que nos guardes de la pena
de volverte a ver morir
para dar paz a la tierra

Rosalia Caniarasa Hidalgo