Cuando fue conquistada por los cristianos en 1244, su término municipal era muy amplio, puesto que comprendía
Agullent hasta 1585, así como la partida de los Alforins, concedida por Jaume I en el año 1256 y convertida en municipio en 1927. Fue Villa Real con voto en las Cortes del Reino, aunque durante algunos cortos periodos perteneció a personas de la
familia real como el infante Pedro, Ramón Berenguer, etc., o de la nobleza como los Vilaragut, etc. Con Villena tuvo numerosos pleitos por cuestión de límites territoriales. Durante las Germanías en 1522, el lugarteniente conde de Melito ocupó la población, tras refugiarse los realistas en lo alto de la ciudad, e hizo un gran número de prisioneros, que utilizó como rehenes para liberar a su hermano, el marqués de Zenete, recluido por los agermanados en el
castillo de Xàtiva.