El Rinconcito de Falena, Inmaculada.
EL ADIÓS A UN AMIGO
Hoy, se ha roto esa magia del entorno
Hoy, percibí las tinieblas de la noche
hoy, lloré al pronunciar tu nombre
¡Cuantos recuerdos quedaron enterrados!
Ya no somos aquellos que un día fuimos
Amigos de contarnos las historias
Sé que nada tuvimos nunca oculto
Que éramos, quizás, la envidia de la gente
Pero ¡qué poco nos queda ya de aquello!
No te guardo rencor, amigo, mío
No podría, jamás, hacerte daño
Por todos los momentos compartidos
Por todos los secretos mantenidos
Tus manos abrirán otras ventanas
La mía quedará como entornada, y no con llave
Por si un día pudieras abrirla todavía
No te digo adiós ya para siempre
No podría decirlo, amigo, mío
Solo digo, hasta siempre, y con tristeza
Pues en mi alma conservo lo que había
Hoy, se ha roto esa magia y es lo cierto
Que muchos se alegraron que así fuera
Pero, siempre, guardaré yo en mi memoria
Aquello que nadie nunca supo
EL ADIÓS A UN AMIGO
Hoy, se ha roto esa magia del entorno
Hoy, percibí las tinieblas de la noche
hoy, lloré al pronunciar tu nombre
¡Cuantos recuerdos quedaron enterrados!
Ya no somos aquellos que un día fuimos
Amigos de contarnos las historias
Sé que nada tuvimos nunca oculto
Que éramos, quizás, la envidia de la gente
Pero ¡qué poco nos queda ya de aquello!
No te guardo rencor, amigo, mío
No podría, jamás, hacerte daño
Por todos los momentos compartidos
Por todos los secretos mantenidos
Tus manos abrirán otras ventanas
La mía quedará como entornada, y no con llave
Por si un día pudieras abrirla todavía
No te digo adiós ya para siempre
No podría decirlo, amigo, mío
Solo digo, hasta siempre, y con tristeza
Pues en mi alma conservo lo que había
Hoy, se ha roto esa magia y es lo cierto
Que muchos se alegraron que así fuera
Pero, siempre, guardaré yo en mi memoria
Aquello que nadie nunca supo