Del
claustro, llamado "del silencio", corazón vital del
monasterio benedictino y nexo de unión entre sus dependencias más importantes, poco queda, por desgracia.
Su solar se encuentra al sur de la
iglesia, como es habitual.
Arcos reconstruidos del antiguo claustro. Monasterio de Valldigna
Su planta es cuadrada y debió tener sus pandas abovedadas con crucería (se conservan algunas ménsulas de poyo de los nervios) y abiertas al
patio mediante arcos apuntados.