Foto de Vicente MR
El nuevo
faro tiene una imagen mucho más moderna, no es como los de antes. Tiene 32 metros de altura ye está justo en la
esquina del Muelle de Cruceros a muchos metros de su antecesor. Tras la ampliación del
puerto, la altura del dique y su lejanía del centenario faro dificultaban la visibilidad de la luz desde el
mar, así que era necesario construir un nuevo referente para navegantes en la costa valenciana. Se puso en marcha la
noche del 23 de junio del 2015. Está hecho a base de fibra de vidrio y fibra de carbono, que lo hace resistente y muy ligero. De
color azul y amarillo.
Emplea tecnología LED que se nutre principalmente de
placas solares y un pequeño aerogenerador. Es totalmente autosuficiente y actualmente tiene capacidad para seis o siete días de autonomía. El nuevo faro del puerto de
Valencia, ejecutado por ACCIONA Infraestructuras, ha obtenido el
premio a la innovación en la categoría de infraestructuras en los JEC World 2016 Innovation
El nuevo faro del Puerto de Valencia
El nuevo faro del puerto de Valencia, ubicado en la ampliación norte y en funcionamiento desde la noche de
San Juan, es el primero del mundo construido íntegramente con materiales ligeros que garantizan mayor resistencia a los ambientes marinos e incorpora diez paneles solares orientados al sur.
El faro, de 32 metros de altura que proyecta sus luminarias hasta 22 ó 25 millas mar adentro, y diseñado por el arquitecto Ignacio Pascual, exdirector de Infraestructuras de la Autoridad Portuaria de Valencia, ha recibido varios reconocimientos internacionales.
El nuevo faro fue finalista en los
premios anuales organizados por la IABSE, la Asociación Internacional de
Puentes e Ingeniería Estructural, un galardón que se suma al premio obtenido en 2016 en los JEC World Innovation Awards, las distinciones más importantes del mundo en el ámbito de los materiales compuestos.
Es el primero del mundo construido íntegramente con materiales compuestos como la fibra de carbono y la fibra de vidrio, lo que le confiere gran ligereza, con solo 3.000 kilos de peso.
El uso de los materiales compuestos garantiza una mayor resistencia a la
exposición a los ambientes marinos al no verse afectados por la corrosión, menores labores de mantenimiento y una reducción de un 20 % de las emisiones de CO2 en el proceso constructivo al requerir menor desplazamiento de materiales pesados.
La nueva instalación dispone de tecnología led, lo que permite un alcance de 25 millas náuticas, con un consumo eléctrico de 70 vatios y una vida útil de 100.000 horas.
Asimismo, es autosuficiente al utilizar energías renovables ya que incorpora diez paneles solares orientados al sur y un aerogenerador de eje vertical, lo que contribuye a reducir significativamente su consumo energético.
Fuente: EFE APV, TVE