El pueblo de la única calle tiene muchas historias que contar con sus miserias y sus grandezas incluidas. Detalles que forjan un destino de destierro y nostalgia permanente para todos aquellos que nunca regresaron. Les invito a volver, a regresar, a desterrar el destierro, a aborrecer la nostalgia. El ayer es hoy, el mañana esta vivo con sus cinco sentidos. Acedera somos todos, del chico al grande y del pobre al rico, del villa rivense al villa bajense, y del ateo al devoto. Y todos somos uno; un ... (ver texto completo)