De sobresaliente atractivo plástico resulta el
Ayuntamiento, uno de los más hermosos, quizá de la región, en cuya variada composición destacan sus
soportales y galerías. El
edificio correspondiente a un antiguo centro religioso conectado con el
convento franciscano de Montevirgen de Villalba, fue restaurado con notable acierto en 1920, presentándose hoy impecablemente encalado y cuidado