No es que sea una joya arquitectónica, como el
pórtico de la
iglesia de Finibus que estos Torquemadas modernos han borrado, pero tiene un gran valor en tanto en cuanto, que es uno de los muy pocos, que aún pueden funcionar en este País de Paises nuestro, poblado por gente que despreciamos y menospreciamos a todo aquello que ignoramos. Como dijo el clásico.
Salud.